¿Conoces la relación entre el cocooning y la decoración del hogar?

En estos días me viene a la mente la palabra cocooning. ¿La conoces?

Los españoles hemos caído en una tendencia (ahora obligada) ya común en Europa como es salir menos de casa y vivir mejores experiencias dentro del hogar. Esta práctica, denominada cocooning (del inglés cocoon, «cápsula») tiene su relación con la decoración del hogar.

El cocooning habla de aprovechar los momentos de desconexión, algo que se vuelve más sencillo si salimos de la agitada urbe y nos acercamos a espacios naturales, como ríos, montañas o playas. No hace falta contar con grandes estancias, solo fomentar la comodidad y calidez de las mismas, y en este sentido la naturaleza cobra un valor especial. Crear espacios relajantes, casi mimetizados con el entorno o trasladar la paz medioambiental a las habitaciones, son algunos de esta tendencia decorativa.

Se proponen materiales sostenibles que no dañen el ambiente que rodea a estas edificaciones. Una cabaña, una casa rústica, las paredes de piedra o una chimenea son elementos que permiten alejarse, también emocionalmente, del frenético ritmo de vida que impera en las ciudades, y del cual huimos cuando practicamos cocooning.

 No necesariamente tienes que tener una casa de campo, el estilo cocooning también puede ser trasladado a tu hogar en la ciudad. Se trataría de transformarlo en un sitio cálido, cómodo y acogedor, tanto para disfrutar en soledad como para compartirlo en compañía de la familia o de invitados.

En definitiva, tu casa debe ser un lugar que no te apetezca abandonar, si así lo sientes, enhorabuena, lo has conseguido.

Aprovechemos este tiempo para disfrutar del verdadero placer del cocooning.

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